Temas Poetas

Poemas y poetas salvadoreños

André Cruchaga: Ahora, hoy, siempre

Ahora desnuda tu alma.
Hoy he salido de la noche
A buscar tus ojos que ven
En la remota distancia.
Siempre busco una forma:
La forma del amor desnudo
Que calcina como fuego.
Ahora eres densa en mi Psique,
Y siendo lo que eres:
-mi perpetuo pensamiento-
que la luz caiga al alma
entera y unitaria.

Poemas cortosPoemas y poetas salvadoreños

Ahora: Poema de Luis Antonio Chávez en español fácil de leer

Aída Elena Párraga: Solo

acompañado por los jades de la hierba
llora el ciruelo
su corazón roto.
Allá, donde nada crece,
donde la raíz es huérfana de todo,
llora el ciruelo
su corazón roto...
¡Cuanta lágrima de almíbar
en el fondo de la copa!
Igual que el hombre,
el ciruelo ahoga
en espíritus de granos
sus heridas...
Allá,
solo,
donde nada crece
en un eterno brindis por la vida.

Poemas cortosPoemas y poetas salvadoreños

Eugenio Martínez Orantes: Aída

La primera brasa que tuve
se llamaba Aída.
Tenía el pelo alegre
como un trigal sembrado en una perla,
y unos ojos de fiesta donde el cielo
nacía diariamente.

(Ella fué la culpable de que yo empezara
a escribir garabatos sobre las espaldas
de lejanas estrellas)
...los dos éramos hijos de mecánicos,
los dos éramos hijos
de esa clase de hombres sudorosos
que aman la paz y aman el trabajo
y que al acariciar manchan de grasa.

La primera brasa que tuve
se llamaba Aída.
Los dos creíamos
que la vida era
un juego azul carente de final,
...Yo recuerdo que nunca nos pusimos
a pensar en la guerra y en sus muertos
ni en los países grandes que conservan
sus deudos con cañones y con tanques.
Nunca hablamos de eso. Ni del hambre
que roe y que taladra los estómagos
y aúlla en las esquinas de los barrios.
Los dos éramos niños todavía.
Ella fué un liriosol entre mis manos,
un venado de fuego saltando por mi frente
un canarioazucena
bañando mi costado de músicaperfume.

Han pasado los años.
Aída es una flecha cruzando mi recuerdo.
Yo estoy como los árboles:
enraizado a la tierra,
frente a los huracanes,
con los brazos cubiertos de frutos
y de trinos;
esperando el fulgor de un nuevo día.

Poemas y poetas salvadoreños

Carmen González Huguet: Aire sólo

Aire sólo, fervor que callo y digo,
palabra que te nombra y te delata,
que te eleva en su vuelo o te maniata:
en mi boca te encierro o te prodigo.

Te dejo a la intemperie o al abrigo,
te guardo en ventisquero o en fogata.
Pródiga, codiciosa catarata,
vas en mi labio como fiel testigo

de todo lo que en él pones y eres,
de todo lo que en él tu sed convoca
y de lo que en su amor beber quisieres.

Silencia esta ebriedad que el labio aloca
y con el agua en que dichoso mueres
cúbreme, amor, el cielo de la boca.

Poemas y poetas salvadoreños

Mercedes Durand: El aire

El aire se alistó de marinero
con boina de muchacho vagabundo,
un barco lo condujo por el mundo
soplándole el blancor de su velero.

El aire se cansó de aventurero
y quiso conocer el mar fecundo,
un buzo le enseño de lo profundo
corales encendidos al viajero.

El aire se compró boina dorada
y fue por los jardines de la infancia
soltando su frescura oxigenada.

El aire, del jugar hizo bandera,
un juego alimentado en la fragancia
del yodo y la campiña volandera.

Poemas y poetas salvadoreños

Mario Noel Rodríguez: Alejanía

en el centro puntual de la maraña
Dios, la araña
Alejandra Pizarnik(Escrito el día fatal)

Allá donde la carne es harapos
mi corazón es reflector.
La araña con su linterna estudiaba tus pasos al alba.
No sabía que volabas,
que subida a un relámpago perdido
pisabas las tripas de la eternidad y sus hijos leprosos.
Te vi en sueños con muñecas de dolor,
no veías más que un gato descompuesto en sombras.
Te hablé, sólo pateaste la atribulada ceniza
de los profanados por el crepúsculo.
Un verso mordiendo su propia cola, escribiste.
Lo busqué en la alcantarilla de la pasión
pero lo tragó Merlin, estallando.
Y han pasado años bajo el puente
donde bocabajo la araña teje promesas,
bufandas, gorros para protegernos de la noche
en que no quede pelvis sobre pelvis.
En tu sombra dormitaré feto.
Alejanía, teclado de invierno,
allá voy contra el clavel que atravesó tu pecho,
tu voz de insecto imaginado.

Poemas y poetas salvadoreños

Federico Hernández Aguilar: Algarabía de mi sombra

Encontré el soneto sobre mi cama.

Un olvido, aparentemente.

Lo he leído a algunos amigos
y me dicen que no lo publique,
que en realidad no esmío,
que no puede serlo,
que lo será algún día...
Aseguran que me estoy plagiando.

'¿Admitirás que lo escribió ella?', me preguntan.

Ella. Ella. Ella. Ella. Ella.

El eco es atroz.

Pero el soneto es tan mío como siempre:

'Algarabía cruel de los gemidos -dice el primer verso-,
mi sombra acude -(¿Ven cómo si soy yo?) -. Fuga de los años.
Recuento proverbial de mis engaños.
pereza de la tumba. Mis latidos. (Hablo de mí, ¡de mí!).

Hemisferio de rastros encendidos -reza el segundo cuarteto-.
Absurda beatitud. Molestia. Daños. (Es mi estilo, sin duda).
Paz en las huellas. Vínculos extraños.
Gorriones sin hogar y enfurecidos.
(Ella no pudo escribir algo así).

Maravilla. Pasión devoradora.
Karma de sal. Presencia de la vida. (Es mi sabiduría).
Ritmo. Restauración. Rencor. Aurora.
Rúbrica de la forma. Luz sin brida. (Un verso demasiado mío).
Esencia inaugural. Moral perdida.
¡Secuencia de una lógica inodora!'.

.......

Bien. Admito que algunas imágenes son suyas.

¡Pero la idea es mía!

Además,
ella piensa que escribir sonetos es una mariconada.

Poemas y poetas salvadoreños

Roque Dalton: ALGUNAS NOSTALGIAS

Encallecido privilegio este orgulloso sufrir,
no se rían.

Yo, que he amado hasta tener sed de agua, luz sucia;
yo que olvidé los nombres y no las humedades,
ahora moriría fieramente por la palabrita de consuelo de un ángel,
por los dones cantables de un murciélago triste,
por el pan de la magia que me arrojara un brujo
disfrazado de reo borracho en la celda de al lado...

Poemas cortosPoemas y poetas salvadoreños

Alianza de mis manos: Poema de Ricardo Bogrand en español fácil de leer

Néstor Martínez: Allí estamos

En el calor del trópico
En el silencio de la noche
En el murmullo del mar
En el rozar del viento
En el sol ardiente
En el canto del ave
En el rosado amanecer
En el apacible ocaso
En la turbulencia del huracán
En la brisa matinal
En la ausencia de nuestra voz
En el recuerdo de nuestro tiempo
En la monotonía de la lluvia
En la espera de la esquina
En el latir acelerado del corazón
En la carcajada limpia
En el trepidar del fuego
En la hierba salvaje
En la selva perdida
En el rugido del jaguar
En el silencio cuando nos miramos
En el tacto de nuestras manos
En el camino que lleva a casa...

Poemas y poetas salvadoreños

Rafael Mendoza: Con el alma a media asta

Decido
No volver a llorar
Pues ya no puedo.

Propongo
No volver a reír
Pues no me sirve

Deploro
No poder ya gritar
Pues no hay oídos.

Lamento
No llegar a morir
Porque estoy muerto.

Poemas cortosPoemas y poetas salvadoreños

Amado NervoFederico García LorcaGabriela MistralGustavo Adolfo BécquerJorge Luis BorgesLuis de GóngoraMario BenedettiOctavio PazPablo NerudaRosalía de CastroSan Juan de la CruzSor Juana Inés de la Cruz