Poemas de José María Eguren para leer.
El mustio peregrino
vio en el monte una huella de sangre:
la sigue pensativo
en los recuerdos claros de su tarde.
El triste, paso a paso,
la ve en la ciudad, dormida, blanca,
junto a los cadalsos,
y al morir de ciegas atalayas.
El curvo peregrino
transita por bosques adorantes
y los reinos malditos,
y siempre mira las rojas señales.
Poemas cortosPoemas y poetas peruanos
Brunas lejanías...;
batallan las torres
presentando
siluetas enormes.
Áureas lejanías...;
las torres monarcas
se confunden
en sus iras llamas.
Rojas lejanías...;
se hieren las torres;
purpurados
se oyen sus clamores.
Negras lejanías...;
horas cenicientas
se obscurecen
¡ay, las torres muertas!