Poemas de Rafael Gutiérrez para leer.
Amaneció un revuelo el atrio de la iglesia.
La Virgen Concepción,
que desembarcó engalanada de tafetanes, sedas y
oros de Aragón y Castilla,
amaneció completamente desnuda.
No hubo robo ni ultraje. Sólo eso:
que amaneció completamente desnuda.
Y allí está:
tiritando de frío,
como si nada mostrando la mercancía,
mirando con extrañeza
a las indias vestidas de pájaros, frutas, soles,
lagos y amaneceres.
Poemas cortosPoemas y poetas guatemaltecos
Ante el dentudo acoso de sus sabuesos,
nosotros salíamos siempre en debandada.
Así,
dejábamos coches, gallinas, chuchos
y, ardiendo todavía sobre la leña,
la sagrada y redonda tortilla.
Así andábamos: como pedazos despedazados
de un solo y único cuerpo
que debe ser el pueblo.
Poco a poco, sin embargo,
las uñas están regresando a sus manos,
las manos a sus brazos,
los brazos a su cuerpo.
Y también los ojos, que cada vez ven más claro
en medio de la noche más cerrada y llorosa.