Temas Poetas

Mayamérica Cortez

Poemas de Mayamérica Cortez para leer.

Mayamérica Cortez: Por las calles de North Hollywood

Verano de 1982

¿Alguien sabe lo que es el dolor de distancia?
Se prolonga sin tiempo ni medida.
Es sentirse de pronto al centro de la 'Nada'.
De una circunferencia vacía de todo.
Desconocer el rumbo cierto y no saber
si estamos dormidos o despiertos.

Sentir la brisa.
Palparla con las manos abiertas
pero no comprender de pronto
por dónde se nos escapa.
Ver las calles y saber que no son diferentes.
Los árboles los plantan guardando la misma simetría.
Autos, gente, comercio... ¡Todo!
-es lo mismo aquí o allá- Pero...
¿Por qué este vacío?
¿Por qué esta soledad y este dolor adentro?

Recordar una Patria y unos hijos.
Sentir la ausencia de todo
porque el alma está lacerada.
En mi pupila tres rostros amados.
En mi pensamiento tres nombres
perennes, constantes, habitantes de mi sangre:
¡Mis Hijos, mi Patria y mi Hogar!

Poemas y poetas salvadoreños

Conversación Sobre la Muerte con mi Pequeño Hijo: Poema de Mayamérica Cortez en español fácil de leer

Mayamérica Cortez: En el exilio (I)

Escritos cualquier día
entre 1980 a 1984

¡Un día más!
¡Déjame, Señor, vivir los suficientes
para tenerlos de nuevo conmigo!
El corazón duele mucho más
de lo que el poeta puede decir.

El corazón es una congoja constante
y la ansiedad del regreso
es una golondrina tímida
asustada
por la inmensidad de las ciudades
de los mares y desiertos.

¡La ansiedad del regreso!
Un temblor palpitante
dentro de mi mano.
Si el día empieza o la noche termina...
¡Qué más da si no los tengo conmigo!

La Vida es el misterio
el enigma de lo inesperado.
Y mis ojos, abiertos y vacíos
permanecen a la vera del camino.

El corazón está desfallecido
pero, Señor... contigo
el alma encuentra fuerzas
para un día más...
¡Un día más en esta larga espera!

Poemas y poetas salvadoreños

Mayamérica Cortez: En el exilio (II)

Estoy cansada.
Cansada de caminar
de buscar y buscar
la sonrisa de mis hijos
sus grandes ojos tiernos y dulces.

Quiero escuchar su voz diciendo
'mamy, te queremos'.
Quiero sentir sus besos
sus caricias en mi cabello.

¡Qué soledad y tristeza adentro!
Sólo Dios conmigo.
El y la esperanza quieta
profunda, adentro de mis ojos.

Dame fuerzas, Señor y Padre.
Necesito mucho de tí.
No me abandones...
¡El camino es largo
y aún no termina!

Poemas y poetas salvadoreños

Mayamérica Cortez: En el Exilio (III)

El camino se ha detenido.
El frío se cuela penetrante en mi alma.
¿Soledad? Sí, siempre
estuvo allí. Indecibles
las palabras se quedan estáticas
mudas ante mí.

El silencio abrumante
es cristal opaco que se quiebra
en las horas de café, cigarrillos
notas cuadrando en mi horario.

El dolor de la nostalgia horada el corazón.
He de reiniciar la marcha
pero la yerba ya no es alfombra para mis pies.
Y hay hormigas sobre mi espalda.

Dobladas mis rodillas
se adhieren a la tierra...
¡Pero habré de levantarme!
Mi meta está allí
donde quiera que cruce la mirada.
El camino continúa y yo con él.

Poemas y poetas salvadoreños

En el exilio (IV): Poema de Mayamérica Cortez en español fácil de leer

Lamento indígena: Poema de Mayamérica Cortez en español fácil de leer

Mayamérica Cortez: Mar con rumor de gaviotas

No sé si llego o si regreso.
No sé si me esperabas o si me buscabas.
No pregunto. Tampoco respondo.
Te traje a mi dimensión de arrecife y coral
porque tu barca atisbaba mi horizonte.
Navegaste con hábil precisión
entre mis acantilados
desafiando mis olas embravecidas
y el compás y la brújula
te fueron inútiles para conocer
el rumbo de mi viento.
¡Y desarmé tu sed de navegarme!
No debiste desafiar la calma de mi orilla.
Deshice los nudos de tus lazos
rompí tus velas y tus estandartes
y por fin… desarmado y vencido
te hice naufragar en mi caudal
de mar y profundidad.
Quedaste exánime boca abajo
tendido en la arena de mi playa.
¿Qué pregunta, qué orilla o qué coral
para desandar mi arena sobre tus huellas?
No sé si llego o si regreso
en el incesante va-y-ven de mis olas
No. No pregunto porque después de todo
tampoco hay respuestas.
Sólo sé que soy este mar con mi calma de eternidad
y mi rumor de gaviotas.
Sé que soy el mar con dimensiones inabarcables
aunque no hayan más caracolas en mis playas
porque lejos se ha ido el amanecer de los recuerdos
y aunque no sepa si llego o si regreso.

Poemas y poetas salvadoreños

Mayamérica Cortez: Monólogo

Hoja del árbol desprendida.
Cuerda solitaria
suelta de la guitarra del tiempo.
Mis raices enredadas en el vacío
tienen la curvatura de la distancia.

Viajo por los albores del día
como un tintineo campirano
con presunciones de catedral.

Libros, estantes, mesa y música
la silueta detrás del espejo
es una pupila abierta a la solitud
y plenitud interna.
¿Quién dijo que la soledad existe?
¿Quién dijo que debemos estar con gente
para no estar solos?

Aquí en mi pecho
un murmullo crece y crece
la garganta quiere cantar y cantar
unirse a la música del universo y
agradecer la belleza contenida en mis esferas.

Mis raíces penetran el sentimiento profundo
de tus días idos y de tus días por venir
junto a las aguas del río descansan mis recuerdos
y la curvatura de la distancia
se acorta en nuestras manos enlazadas.

Viajo por el arco-iris
Para llegar hasta el silencio mismo.

Poemas y poetas salvadoreños

Mayamérica Cortez: De las palabras

Es que hay algo mágico en las palabras.
Se me antojan redondas y suaves
equivalentes al vuelo de los sueños
cadencias voluptuosas
-como las olas del mar-

Las palabras me son cual gaviotas
deslizándose lentas
sobre mi rumor de inmensidad.
Son la vivencia de lo que siento
en este mar que soy
de este viajar que me habita
deshabitando
anhelos...

Porque más que voz
que palabras
son rumor, silencio quizás.
Arrullo y queja. Pasos quedos, redondos
en este círculo invisible
girando lento
muy l e n t o
en la sutil estancia de las horas.

Verano de 1993, Washington D. C.

Poemas y poetas salvadoreños

Mayamérica Cortez: Poema nuevo a una palabra vieja

Y vamos de nuevo
por la senda inútil del desamparo
por el pedregal de los recuerdos
con los ojos engarzados
en soledades que se agrietan.
Y los barriletes de colores
siguen columpiándose allá arriba, arriba
mientras destrenzo mañanares
con caminos inventados
de ciudades rojas y lechos de musgo.
Pero llego y te cerco.
Te acuso amante.
Te señalo y te delato.
Eres el que se llevó mi lluvia
el que sembró tulipanes en mis macetas
con tierra de camposanto
y marcó estaciones en mis días de exilio.
Pero yo soy la Maga del Destierro
y el fuego de mis dedos
está consumiendo los hilos de esta agonía
y hay un adiós en marcha
queriendo alcanzar el tren último
de esta tarde que se detuvo en el pasado.
Y es que no debiéramos decir 'adiós'
sino sencillamente _hasta pronto-
porque los caminos regresan siempre
y la distancia tiene una curvatura suave
que se tiende como un arco
en la mano del Tiempo
y su vertiginoso impulso
hiere audaz
lo que pretendidamente llamamos 'olvido'
con la flecha del 'recuerdo.'

Poemas y poetas salvadoreños

Quemadura de Luz: Poema de Mayamérica Cortez en español fácil de leer

Amado NervoFederico García LorcaGabriela MistralGustavo Adolfo BécquerJorge Luis BorgesLuis de GóngoraMario BenedettiOctavio PazPablo NerudaRosalía de CastroSan Juan de la CruzSor Juana Inés de la Cruz