Poemas de Gómez Manrique para leer.
Sobre el poeta Gómez Manrique [occultar]
Su legado perdura como puente entre la Edad Media y el Renacimiento en la literatura española.
Con la beldad me prendistes,
con la gracia me robastes,
con la bondad me feristes,
al punto que me mirastes.
De la prisión no recelo,
que de mi grado será,
ni por el robo me duelo,
pues en tal lugar está;
mas del golpe que me distes
con la bondad que mostrastes,
el más triste de los tristes
para siempre me tornastes.
Poemas cortosPoemas y poetas españoles
Callad vos, Señor,
nuestro Redentor,
que vuestro dolor
durará poquito.
Ángeles del cielo,
venid dar consuelo
a este mozuelo,
Jesús tan bonito.
Éste fue reparo,
aunque él costó caro,
de aquel pueblo amaro
cativo en Egipto.
Este santo divino,
niño tan benino,
por redimir vino
el linaje aflito.
Cantemos gozosas,
hermanas graciosas,
pues somos esposas
del Jesús bendito.
Poemas cortosPoemas y poetas españoles
Desnuda en una queça,
lavando la fontana,
estaba la niña loçana,
las manos sobre la treça.
Sin çarcillos nin sartal,
en una corta camisa,
fermosura natural,
la boca llena de risa,
descubierta la cabeza
como ninfa de Diana,
miraba la niña loçana
las manos sobre la treça.
Poemas cortosPoemas y poetas españoles
El corazón se me fue
donde vuestro vulto vi,
e luego vos conocí
al punto que vos miré;
que no pudo fazer tanto,
por mucho que vos cubriese,
aquel vuestro negro manto,
que no vos reconociese.
Que debaxo se mostrava
vuestra gracia y gentil aire,
y el cubrir con buen donaire
todo lo magnifestava;
así que con mis enojos
e muy grande turbación
allá se fueron mis ojos
do tenía el corazón.
Poemas cortosPoemas y poetas españoles
Que la boca mencionada
d’este valle temeroso
prestamente fue juntada
con la ribera nombrada
del río tenebregoso.
no sin duda mayor pena
el que tragó la ballena
creo sintiese que yo
en me ver adonde no
fallaba salida buena.
E como toro judío
busca por donde fuir,
andaba del todo frío
desde las cuestas al río
catando por do salir:
mas a la fin no fallaba
en esta ribera brava
ningund seguro pasaje
pues la cumbre del boscaje
con las nubes comarcaba.
Yo parto de vos, doncella,
fuera de mi libertad;
yo parto con gran querella
de vuestra pura bondad.
yo parto con gran tormento
por esta triste partida,
e llevo tal pensamiento
que fará corta mi vida.
Yo parto con gran dolor
por ir de vos apartado:
yo parto muy amador
de vos, que voy desamado.
Yo parto en vuestra cadena
de que no cuido salir,
e llevo tan cruda pena,
que no vos la sé decir.
Yo parto mucho contento
de vuestra gentil figura;
yo parto bien descontento
de vuestra poca mesura.
Yo parto, mas non se parte
siempre de vos mi pensar;
e lievo la mayor parte
de dolor y de pesar.
Yo parto porque me alejo
el más triste que me vi;
yo parto, mas con vos dejo
la mayor parte de mí.
Yo parto triste porque
vuestro mirar me robó,
e lievo por buena fe
gran quexa de vuestro no.
Yo parto porque me aparta
la mi no buena fortuna;
yo parto con pena farta
sin esperanza ninguna.
yo me parto de miravos
con dolor muy dolorido,
e lievo de bien amarvos
prosupuesto no fingido.
Fin
No quiero más enojarvos,
mas por merced yo vos pido
que vos plaga recordarvos
de cuán triste me despido.