Poemas de Delia Quiñónez para leer.
Caes,
caigo
en el abismo
de una lágrima:
agua que no es agua.
Sal que no admite lo salobre.
Trémula ¿de dónde llega?
¿Hacia dónde alza
su breve bastión de tiempo ido?
¿En qué iris descompone
su color, su forma vieja
de cristal y olvido?
Agua que no es agua,
ni sabor, ni aliento a rosa.
Dolor deshabitado,
precipitada nube
hacia la tierra que es pecho,
voz, candente forma.
Luz que no es luz
sino quebrada arista,
intangible diamante,
rabia volátil,
encrespada negrura,
hierba,
fuego,
luz...
La tarde se tiñó de pájaros,
fue preñándose de plumas...
La vi alzarse
profunda como una campanada.
Pero fue quedándose quieta,
tornándose lejana:
se borraron las plumas,
su tintura de pájaros
fue muriéndose toda...