Temas Poetas

Concha Urquiza

Concha Urquiza

México: 1910-1945

Poemas de Concha Urquiza para leer.

Concha Urquiza: Del ser que alienta y del color que brilla

Del ser que alienta y del color que brilla
me separa tu cálida presencia,
clausurando el sentido en la vehemencia.
de una noche sin fondo y sin orilla.

En ella mi tortuosa pesadilla
te confiere su trágica opulencia,
y tórnase inmortal como una esencia,
siendo que eres trivial como una arcilla.

Te he engendrado en mi lumbre y mi universo,
en tu forma plural he proyectado
la queja vaga y el afán disperso.

Dudando está el espíritu sitiado
si eres mi sangre disculpada en verso
o mi dolor en carne figurado.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Arrepentimiento

Por lo que te he ofendido, dulce cariño mío,
quiero ser a tu anhelo cual sería el rocío:
tierna, dócil y humilde como el agua que mana
y se ofrece a las llagas de la miseria humana.

Yo enseñaré a mis manos a ser mansas contigo,
tal como las entrañas sonrosadas del higo,
para que te acaricien con tan suave caricia
como la voz del ave de la blanca novicia.

Yo enseñaré a mis plantas a que pisen tan quedo
como el viento que mueve las hojas del viñedo,
ya mis claros cabellos a quebrarse en tus manos
como frágiles tallos de lirios franciscanos.

Apoyaré mis dedos sobre tu excelsa frente
y será mi caricia sosegada corriente
para que fertilice tu pensamiento bello
y haga brillar tus ojos con singular destello.

Seré quieta y humilde como la arena rubia
y rozaré tus labios como agua de la lluvia
para llenar las horas del dulzor de las vidas,
hasta que tú perdones y para siempre olvides.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Aunque tu nombre

acaba de entregarte ya de vero.
San Juan de la Cruz

Aunque tu nombre es tierno como un beso
Y trasciende como óleo derramado,
Y tu recuerdo es dulce y deseado,
Rica fiesta al sentido y embeleso;

Y es gloria y luz, Amor, llevarlo impreso
Como un sello en el alma dibujado,
No basta al corazón enamorado
Para alcanzar la vida todo eso.

Ya sólo, Amor, perdido en tus abrazos,
Cabe tu pecho detendr?su empeño:
No aflojar?las redes y los lazos,

Ver?la paz ni gozar?del sueño,
Hasta que tenga paz entre tus brazos
Y duerma en el regazo de su Dueño.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Caminos

Oh dulce canto de viaje,
mi alegría y mi caudal,
más que en las velas el viento
más que el surco en el mar!

Por los senderillos negros
nubes cargadas de afán,
por los senderillos rojos
alardes de tempestad,
por las llanuras inmensas,
soledad...,
pero una canción de viaje
me llena de oro el morral.

Cuán largo camino largo
desde esta noche a la aurora!
mas un cantarcillo alegre
los labios sedientos moja:
«¡Qué amor y qué amores tengo
allá en fronteras remotas!
¿qué camino será largo
siendo camino de bodas?»

La luna viaja de incógnito
tras las nubes borrascosas;
y galopa el duro viento
con el girón de su antorcha;
en la soledad vibrante
se adelgaza cada nota,
y siguiendo la carrera
de la senda voladora,
como una cinta de onix
la noche se desenrolla.

Negro camino impaciente
cárcel que vuela hacia el mar;
hilillo de oro lo enfrena
la música de un cantar:
«¿qué camino será triste
que a tus labios dulces va?»

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Una canción de despedida

Adiós, amor que se queda,
dormido y desnudo al viento;
huellas en tus callejones
prolongarán mis ensueños,
huellas adentro del alma
cultivarán tu recuerdo;
adiós, mi tierra de amor,
dormida y desnuda al viento.

Del vasto mundo, del mundo
ya nada tengo ni quiero;
mas guardado en las montañas
hay un rincón de silencio,
una embriaguez a los ojos,
una ansiedad a los pechos,
y una canción a los labios
que me aguarda en todo tiempo.

Y he de tornar y tornar
como el péndulo viajero,
y como torna la niña
cuando se mira al espejo.
Silencio de mis montañas,
Pátzcuaro de doble cielo,
yo he de tornar y tornar
como el péndulo viajero!

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: La canción intrascendente

Tonadilla de viajero:
del corazón a la boca,
y de la boca, al sendero.

Siembra los rumbos del viento
y quién sabe
si vayas a hacer granero
en la garganta de un ave.

Por los valles y los montes
anda a probar tu fortuna:
los cabellos de los pinos
huelen a viento y a luna.

El río tiene su flauta
y la fuente sus espejos:
quédate y canta con ellos,
nosotros vamos más lejos.

Tu padre no quiere oírte
después de haberte engendrado:
no eres más que una canción
que el viento se habrá llevado.

Viajeros somos, viajeros
que andamos nuestro camino:
luna y monte, monte y luna,
manta y silbo, pan y vino.

Y como es recio el camino,
llevamos por equipaje:
en el pecho, el corazón,
y en la boca una canción
para el viaje.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: La canción de junio

Junio, brazada de soles
por el campo florecido,
¿qué le dirás a mi alma
que quiera prestarte oído?
¿Qué le dirás a mi alma,
Junio, de verde vestido?

El amor de los donceles
se fue por el monte arriba;
el amor de las doncellas
siguiendo sus pasos iba;
ni un brote abierto dejaron,
ni una flor dejaron viva...
Pan ha callado el arrullo
de su flauta primitiva.

Junio, mojado de lluvia,
Junio, dorado de trigo,
rojo de tierra del monte,
rostro de sátiro amigo,
¿si creerás que como otrora
hoy me embriagaré contigo?

Casa de olvido me dieron
-muros altos, blancas tejas-;
mi Amado cercó la entrada
del vellón de sus ovejas;
la paz me besó en el rostro
tras los hierros de las rejas...
Por el bosque sosegado
Eros olvida sus quejas...

Junio, pintado de luna,
Junio, de ardores ceñido,
¿qué le dirás a mi alma
que quiera prestarte oído?
¿Qué le dirás a mi alma
Junio, de lluvia vestido?

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: La canción de Sulamita

Indica mihi, quem diligit anima mea, ubi
pascas, ubi cubes in meridie, ne vagare
incipiam post greges sodalium tuorum
Cant. 1, 6

Hazme saber, Amor, donde apacientas,
Dó guías tus rebaños, dónde vagas,
No huelle tras las ínsulas aciagas
Las rutas de la tarde cenicientas.

Tu grey, oh tierno Amor, dó la sustentas
Y con pastos riquísimos halagas,
Mientras mi torpe corazón amagas
Con sendas largas, y con horas lentas.

No principie a seguir de los pastores
Los dispersos rebaños. Vida mía;
Muestra, lejos, el sol de tus amores;

¡dime dónde apacientas todavía!,
y seguiré tu rastro entre las flores
por los fuegos del áureo mediodía.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Cancioncilla

¿A quién contaré mis quejas,
mi lindo amor,
a quién contaré mis quejas
si a voz non?...
Canción popular del s. XV

Amor, corriente escondida
que pechos adentro va,
como un manantial que está
alimentando mi vida;
en turbias aguas perdida
abreva el alma dolor:
si no te la cuento, Amor,
¿a quién contaré mi herida?

Flauta y risa, pan y abrigo,
levanten gritos de guerra;
lágrimas brota la tierra
que amargan la vid y el trigo;
zumo de dardo enemigo
la dulce vida envenena:
¿cómo lloraré mi pena
si no la lloro contigo?

Negras alas han manchado
el claro cielo de estío;
se encrespa el seno del río
de recias olas turbado:

cómo pasaré este vado
sino en tus brazos, amor?
¿Cómo beberé el dolor
si no lo bebo a tu lado?

Poemas y poetas mexicanos

Canciones en el bosque: Poema de Concha Urquiza en español fácil de leer

Concha Urquiza: Ya corre el corazón

oh cristalina fuente,
si en esos tus semblantes plateados
copiases de repente
los ojos deseados
que tengo en las entrañas dibujados
San Juan de la Cruz

Ya corre el corazón por este suelo
Como antes del remanso el agua impura:
Aún lleva tierras en la entraña obscura
Y pretende copiar la faz del cielo.

Van creciendo el dolor y el anhelo,
La corriente se turba y se apresura,
Y es fuente el sedimento de amargura
Más que las alas con que intenta el vuelo.

Si tendieras la mano solamente
Y el agua temblorosa se aquietara,
Ya, contemplando el cielo largamente,

¡Oh Deseado!, el corazón dejara
flotar sobre su sueño transparente
la divina belleza de tu cara.

Poemas y poetas mexicanos

Concha Urquiza: Mi cumbre solitaria y opulenta

Mi cumbre solitaria y opulenta
declinó hacia tu valle tenebroso,
que oro de espiga ni frescor de pozo
ni pajarera gárrula sustenta.

En tu luz gravitante y macilenta,
quebrado el equilibrio del reposo,
vago sobre tu espíritu medroso
como un jirón de bruma cenicienta.

Libre soy de tornar a mis alcores
do Eros impúber la zampoña toca
ceñido de corderos y pastores;

mas a exilio perpetuo me provoca
la chispa de tus ojos turbadores,
la roja encrespadura de tu boca.

Poemas y poetas mexicanos

Amado NervoFederico García LorcaGabriela MistralGustavo Adolfo BécquerJorge Luis BorgesLuis de GóngoraMario BenedettiOctavio PazPablo NerudaRosalía de CastroSan Juan de la CruzSor Juana Inés de la Cruz