Temas Poetas

Alberto Ángel Montoya

Poemas de Alberto Ángel Montoya para leer.

Alberto Ángel Montoya: Esa mujer

La noche junto a mí. La compañera
del alcohol, los besos y el desvío.
La noche en el espacio y en el frío.
La noche en fin. Y una mujer cualquiera.

Una mujer cualquiera en el desvío
de la hora que ríe placentera.
Una cualquier mujer que no supiera
más que pasar la noche bajo el frío.

Pasar la noche y esperar la aurora.
Y al vino devolver su primitiva
forma de uva, la boca tentadora.

Esa mujer eterna y fugitiva.
Esa mujer de siempre y de una hora:
Mariela, Esther, Emperatriz, Oliva.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: La niña de las naranjas

Muchachita de la aldea,
flor de la villa cercana,
llevas la noche en los ojos
y el sol reluce en tu cara
Yo ayer me encontré contigo
cuando cruzabas la plaza,
y vi en tus manos tus senos
al ofrecerme naranjas.
Te pregunté si eras de alguien,
tú no me dijiste nada,
y te besé en los dos ojos
por si tu boca abrasaba.
-Alas de sombra cruzaron
sobre tus ojos en agua.
El niño Amor, atrevido,
oprimía las naranjas-.

-Vente a mi casa, te dije
porque tus ojos lloraban.
Mi caballo sabe bien
llevar mujeres al anca.
-La chiquilla de la aldea,
hecha de sol y naranjas,
jugando a no dcspertarme
me despertó esta mañana-.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Nocturno

Un doncel y una estrella compendian el nocturno.
Sobre la playa el grácil doncel está desnudo.

Tendido el cuerpo y pálido a la luz de la estrella,
se le pensara al verlo formado de la arena,

como si un ángel virgen de ociosos digitales,
jugando con la arena, formado hubiese otro ángel.

Hasta la mancha misma de crenchas en desorden
se blanquea de estrella y se azula de noche.

Y así todo él sería de un blanco azul moreno
si sus ojos no fueran intensamente negros

ahora que me miran. Su mirada ha quedado
como una orquídea negra sobre mi traje blanco.

La luciré esta noche que es de orgía en el puerto.
El doncel mira al río, y en el río va el cielo.

La estrella está muy lejos, allá; mas si la miro
encuentro que la estrella también está en mismo.

Un canto de mujeres que irrumpe en la ribera
me abre siete caminos de amor hacia la hembra.

-Mi cuerpo, al apartarme del río y del rapaz
finge en la azul penumbra una estatua de sal.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Ofrenda

Qué dualidad de arcángel y vampiro.
Frío de sol y llama sobre el hielo.
Qué luz de amor y para amar, el cielo
concretado en tus ojos de zafiro.
Tendiéronse tus brazos en un giro
insinuante y febril de alas al vuelo,
y tu seno emergió del terciopelo,
mitad forma al amor, mitad suspiro.
Toma desde temprano, me dijiste
-y era leve tu voz como tu mano-
lo que tarde entregar me fuera triste.
Aromaba tu fruto mi verano,
y como por temprano lo ofreciste,
tomé el fruto por bello y por temprano.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Pasión tardía

Toma la copa y bebe, que mañana
no habrá vino en tu copa ni en la mía.
Inútilmente prolongué mi fría
indiferencia mentirosa y vana.

Rompe la copa y ríe... Que si un día
te hizo llorar mi juventud liviana,
en el fervor de mi pasión tardía
te llamo mía, y te apellido hermana.

Que importa si en ruidosas bacanales
o en los brazos de todas las rivales
burlé tu lloro y angustié tus días,

si hoy al final de haber reído tanto
preso en la red que me tendió tu llanto
vengo a llorar para que tú sonrías.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Perennidad

Señora, estoy aquí en el sitio
de aquel diván y aquel recuerdo.
Es ya ceniza el fuego extinto,
pero al crepúsculo otro leño
se encenderá para el olvido
y habrá otro amor cerca del fuego.
-Tedio del goce en lo previsto
tras la igualdad de lo diverso-.
Yo estaré solo y en mí mismo.
Tú de ti misma estarás lejos.
Pero aunque todo esté distinto
y se ilumine un amor nuevo,
tú volverás desde el olvido
en el crepúsculo y el fuego.

Poemas cortosPoemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Tu pie

Nardo y rosa, tu pie guarda una clave
de voluptuosidad que me estremece,
cuando en la alfombra silenciosa y suave,
bajo tu bata, al caminar, florece.
Si en las manos lo tomo, me parece,
transido al roce de mi tacto, un ave
que al sentirse cautiva, desfallece:
tan pequeño es que entre mi mano cabe.
Ni en la húmeda curva de tu labio,
ni en tu seno rotundo, ni en el sabio
giro sensual mi esclavitud persiste.
Ese pie, nardo y rosa, diminuto,
en el espasmo breve de un minuto
tornó mi beso eternamente triste.

Poemas y poetas colombianos

Preludio: Poema de Alberto Ángel Montoya en español fácil de leer

Alberto Ángel Montoya: Querella

¿Cómo quieres que cese la querella
que hace hoy de ti un sueño preterido,
si a mi voz el rencor sella tu oído,
y el orgullo a tu voz el labio sella?

Alárgame tu amor, y hasta la estrella
subiré de tu alma, en un olvido
de todo lo gozado y lo sufrido;
hazte más mía y devendrás más bella.

Será otra vez tu juventud el sueño
de ayer y siempre; y en el dulce empeño
de ser yo tuyo para tú ser mía,

matará nuestro amor su desengaño.
Para borrar las lágrimas de un año,
basta el glorioso sonreír de un día.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: Renunciamiento

No sabes tú, doncella que a mi dolor te ofreces,
que mi alma está cercada de horóscopos fatales?
¿No sabes que en mi copa sólo quedan las heces
sacrílegas e impuras del vino de los males?

Si ante la sola angustia de un beso te estremeces,
cómo acoger podría tus dones virginales
aquél que a las virtudes prefirió tantas veces
el goce de los siete pecados capitales?

Huye de mi deseo. La divina serpiente
no cabe entre la curva de tu seno incipiente.
Yo que soy un fantasma de lo que fui, no puedo

contagiarte de sombra. No quiero que en tus ojos
brille una sola lágrima. Huye de los despojos
de un corazón en ruinas por donde vaga el miedo.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: El retorno

Fue tan grande y amargo mi despecho,
y fue tu angustia en el adiós tan poca,
que al recordar la herida de tu boca
soñé con otra igual para mi pecho.

Mas hoy depongo mi rencor. Sospecho
que acaso loco yo, tú también loca,
el mal que así nuestro dolor provoca
uno al otro, a la vez, nos lo hemos hecho.

Prueba la copa y el dorado vino
ofréceme en tus labios. Adivino
que idéntica a esa flor presa en tu broche,

sumisa al ruego del amor serás.
Cómo eres tú, lo comprendí esta noche.
Cómo soy yo, tú nunca lo sabrás.

Poemas y poetas colombianos

Alberto Ángel Montoya: El rito

He hallado un rito antiguo, dolor, para que oficie
tu orgullo su venganza.
Asiática molicie
sobre cojines blandos. Mágico sueño de opio.
Edén imaginario que a la tristeza engañas,
colores imposibles y figuras extrañas
como si fueran vistos en un caleidoscopio.

No saber de los odios, envidias y rencores.
Creer estar tendido sobre un tapiz de flores.
Dejar de ser, o acaso ser todo y no ser nada.

Oh sueño que simulas roce de manos de hada
sobre los ojos puestas. El mundo qué pequeño.
Qué corta la existencia para vivir un sueño.

Frágil entre una nube de túnicas flotantes
pasa un desfile eterno de cuerpos insinuantes
que yo jamás amé.

Y todo en un pesado silencio de nirvana,
mientras que, suavemente, de la mesita enana
se difunde el aroma de las tazas de té.

Y ella lejos, muy lejos. Tan lejos, tan lejana,
que fue un milagro el lecho con ella esta mañana.

Poemas y poetas colombianos

Amado NervoFederico García LorcaGabriela MistralGustavo Adolfo BécquerJorge Luis BorgesLuis de GóngoraMario BenedettiOctavio PazPablo NerudaRosalía de CastroSan Juan de la CruzSor Juana Inés de la Cruz